El Último Vikingo - Linked Minds, Madrid - Review Hall Escape

Nos hallamos ante una situación crítica: nuestro Reino está al borde de la desaparición.

Hemos sido invadidos por hordas enemigas venidas del sur que avanzan imparables, hasta tal punto que, todos los Reyes Vikingos han sido batidos. Antes de que nuestro pueblo sea borrado de la faz de la Tierra, hemos convocado a los líderes de los clanes más importantes para cumplir una última misión:Elegir a un nuevo Rey vikingo.

Nos reuniremos en el bosque de los Dioses junto al árbol de la Vida, os pondremos a prueba y elegiremos a nuestro futuro Rey.

Los hall escapes es una de nuestras tareas pendientes escapistas. Jugamos uno hace tiempo, y la experiencia no fue muy buena. En los últimos tiempos, son varios grupos amigos escapistas que nos han comentado que los hall escape han evolucionado mucho recomendándonos varios de ellos.

Un hall escape no es más que un escape room pensado para grupos grandes (en este caso hasta 16) separados en varios equipos que juegan en la misma sala. Normalmente los equipos suelen competir entre ellos por ser los más rápidos, cada uno de ellos tiene un "pack" de puzzles y enigmas "gemelos" y suelen interaccionar con un elemento central al que todos los grupos suelen acudir. Además la game master suele estar involucrada y presente en la misma sala durante todo el juego.

Con motivo de un cumpleaños covenante, nos juntamos un numeroso grupo y decidimos que la mejor manera de celebrar el día era jugando "El Último Vikingo" de Linked Minds, y más habiendo jugado y dejándonos un buen saber de boca sus otras salas : "Hospital" (sobretodo esta) y "Sunset Boulevard".

Lo primero que llama la atención de "El Último Vikingo" es su ambientación, donde se nota que han hecho un esfuerzo, en darle un toque creíble al aréa de juego y que parezca un poblado vikingo para desmarcarse de los hall escapes más clásicos (aquellos con los jugadores sentados alrededor de una maleta en una "oficina")

El espacio de juego si bien no es pequeño, no sabemos hasta qué punto jugarán cómodos 16 jugadores. Nosotros hicimos 3 grupos de 3 cada uno y en algun momento nos dimos algún culetazo y nos estorbamos en alguna ocasión en el elemento central de juego.

Nos encanta Linked Minds porque siempre dan un puntito extra de complejidad a sus puzzles y enigmas. No son juegos fáciles y siempre tiene un punto de reto que nos mantiene enganchados y con el cerebro funcionando durante todo el juego. Nuevamente nos encontramos con esa esencia de puzzles interesantes, desafiantes y alguno muy original.

El punto que menos nos gustó de la sala tiene que ver con cómo se nos presentan los puzzles y cómo están construidos. Algunos en papeles plastificados, algún metacritalato que no pegaba nada con la temática, y un elemento central algo incómodo y que en algún punto bloqueaba a algún grupo hasta que acabase el otro. Nos hubiese encantado ver más tematizados los puzzles en sí. Los puzzles van apareciendo poco a poco de una ingeniosa y original "mesa de trabajo" pero algo incómoda sobretodo para los jugadores más altos, con el problema añadido de la poca luz que hay (somos algo viejas ya, y a veces, no vemos bien), aunque nos dieron unas linternitas sin customizar para ver mejor (quizá hubiese sido más inmersivo una antorcha eléctrica o algo más temático).

Una cosa que siempre valoramos es el cuidado del sonido. En este caso, nos gustó mucho, que el juego estuvo muy bien acompado de una banda sonora acertada, muy acorde e inmersiva. Y es que escuchar cánticos vikingos repetitivos y rítmicos siempre es un must !!!

El flujo del juego es bueno (aunque hubo un grupo que fulminó al resto), y al final hubo algo de emoción en los instantes finales donde dos grupos que faltaban por acabar y corrián por la sala como locos.

Como siempre, la charla post partida y la atención fue excelente. Siempre que hemos jugados sus salas hacen que nos sintamos cómodos y como en casa. Durante la partida, la game master, estuvo presente en todo momento, manejando bien el timing de los grupos, dentro del papel y pendiente en todo momento de los grupos, sin dar pistas de más ni de menos (sólo cuando eran necesarias) y bastante sutiles.

El Último Vikingo es por tanto es una buena opción para grupos grandes en pleno centro de Madrid. No descrubre nada nuevo ni creemos que reinvente, ni cambie nuestro concepto de los hall escapes, pero es divertida, con puzzles bastante desafiantes y sobretodo adecuada para que llevéis a grupos escapistas no tan jugones y que están comenzando en el mundo del escapismo. Linked Minds siguen haciendo las cosas bien.